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Deuda pública, ¿por buen camino?

Por: Arturo Damm Arnal (@ArturoDammArnal)

 
02 de Febrero del 2016

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Deuda pública, ¿por buen camino?

Por: Arturo Damm Arnal (@ArturoDammArnal)

En el reporte semanal de la Secretaría de Hacienda, correspondiente a la semana del 25 al 29 de enero, leemos, en el encabezado, lo siguiente: “Finanzas públicas 2015, resultados sanos y congruentes con los autorizados”, afirmación que plantea dos preguntas. Lo autorizado, ¿fue lo correcto? Los resultados, ¿realmente fueron sanos?

Centro la atención en la evolución de la deuda pública total (interna –pesos– más externa –dólares–) del Sector Público Federal y la calculo, no como porcentaje del PIB (del ingreso generado por la producción de bienes y servicios en México), sino como porcentaje del ingreso del sector público (del cual saldrán los recursos para servirla y pagarla), lo cual nos da una mejor idea de la situación en la materia (que, desde mi punto de vista, ya es preocupante).

En 2012, último año del gobierno de Felipe Calderón, la deuda total del Sector Público Federal sumó 5,352,795 millones de pesos, equivalentes al 152.3 por ciento de los ingresos presupuestarios del Sector Público Federal. En 2015, a la mitad del sexenio de Enrique Peña Nieto, dicha deuda sumó 8,160,590 millones de pesos, lo cual dio como resultado, en tan solo tres años, un aumento nominal de 47.5 por ciento, y real (descontada la inflación) de 37 por ciento, 8,160,590 millones de pesos de deuda pública total, que equivalieron al 191.4 por ciento de los ingresos presupuestarios del Sector Público Federal. ¿Vamos por buen camino?

Y si comparamos 2015 con 2014, ¿cuál fue el resultado? El año pasado, ¿se modificó la tendencia observada en 2013 y 2014 y nos movimos hacia un menor porcentaje de deuda total del Sector Público Federal como porcentaje de los ingresos presupuestarios de dicho sector, tal y como demandaba el manejo responsable de la deuda público? Veamos.

En 2014 la deuda total del Sector Público Federal sumó 6,947,446 millones de pesos, equivalentes al 174.4 por ciento de los ingresos presupuestarios de dicho sector. En 2015 dicha deuda aumentó en 1,213,144 millones de pesos, equivalentes a un aumento del 17.5 por ciento nominal, y 15.4 por ciento real, para sumar los ya mentados 8,160,590 millones de pesos, correspondientes al 191.4 por ciento de los ingresos presupuestarios del Sector Público Federal. Insisto en la pregunta, ¿vamos por el camino correcto? Y de no ser así, ¿por qué no?

El manejo de la deuda total del Sector Público Federal, en lo que va de la administración peñista, ha sido irresponsable, y de no corregirse tendremos que atenernos a las consecuencias. Y escribo “tendremos” porque los errores en materia de política fiscal, en general, y de deuda pública, en particular, los acabamos pagando todos, no solo los responsables de su concepción e instrumentación. Literalmente pagan justos por pecadores, pecadores que, por lo general, terminan yéndose impunemente, pecadores que son quienes proponen el endeudamiento (comenzando por el secretario de Hacienda) y quienes lo aprueban (los legisladores).

* Arturo Damm Arnal estudió Economía en la UAM y Filosofía en la Universidad Panamericana (UP), en donde se especializó en Filosofía Política y Social. Es profesor de Teoría Económica y de Análisis Económico del Derecho y de Historia del Pensamiento Económico en la Escuela de Ciencias Económicas y Empresariales de la UP. Además, es editorialista en La Crónica de Hoy. Forma parte del grupo de expertos de México, ¿Cómo Vamos? E-mail:[email protected]

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